Malaga CF

La cantera del Unicaja merece una reflexión

Foto de la cantera del Unicaja correspondiente a esta temporada en el pabellón de Los Guindos.
Foto de la cantera del Unicaja correspondiente a esta temporada en el pabellón de Los Guindos. / Unicaja B. fotopress
  • Una nueva política en los equipos de base trae como consecuencia unos resultados inesperados

La temporada 2015-2016 no pasará a la historia como la mejor en lo que a resultados se refiere en el Unicaja. Ni el primer equipo estuvo a la altura de lo esperado ni en las categorías inferiores se alcanzaron los objetivos marcados. Un quinto puesto en el campeonato de España infantil que acabó el viernes ha sido el mejor resultado. Se podría decir que ha sido un mal año, pero a la hora de hablar de la cantera siempre hay que tener en cuenta que el objetivo fundamental es la formación y no los resultados. Sin embargo, esto no quita para que se hagan una serie de valoraciones sobre la salud de la cantera de Los Guindos y para entender lo que ha pasado esta temporada y lo que puede llegar en el futuro.

No más extranjeros

El verano anterior el Unicaja optó por imponer un nuevo modelo de cantera en el que ya no tenían cabida los jugadores extranjeros con proyección. Así, desde hace dos temporadas el club no ha incorporado jugadores foráneos, en una apuesta por el mercado local, regional y nacional. La idea fue celebrada por algunos que consideraban que los extranjeros restaban espacio a los jugadores nacionales. Sin embargo, la realidad es que ha colocado a los equipos de Los Guindos en desventaja respecto al resto de clubes de nivel e incluso los de la clase media. En este tipo de categorías las diferencias físicas son las que marcan y determinan los resultados. Sin jugadores ‘grandes’ y una pizca extra de talento los equipos del Unicaja han sufrido mucho.

Mala nota a nivel nacional

El Unicaja ha perdido fuelle a nivel nacional esta temporada. El equipo júnior lleva dos campañas acabando duodécimo en el Campeonato de España, en el que en la última edición cayó en cuartos de final contra el Real Madrid. Hace tres años fue finalista ante el Real Madrid. Es el primer equipo de la cantera, pues el Clínicas Rincón es un conjunto vinculado. Los técnicos consultados descartan que ningún jugador de esta plantilla que dirige Chiki Gil apunte en un futuro próximo al equipo ACB. Un caso llamativo es el conjunto cadete, dirigido por Leandro Ruiz, semifinalista el año pasado y decimoquinto este, aunque con una generación muy joven y varios jugadores todavía en edad infantil. Y la misma situación se ha repetido con el infantil que tiene como entrenador a Manolo Bazán, que de jugar la final el año pasado contra el Madrid, se tuvo que conformar con el quinto puesto en el campeonato celebrado esta misma semana.

La fuga de los valores

El Unicaja ha sufrido en las últimas dos temporadas un auténtico ‘expolio’ de sus mejores proyectos de futuro. Rubén Guerrero, Domantas Sabonis y Francis Alonso lideraban la mejor generación que había tenido el club en años. Los tres decidieron continuar sus carreras en Estados Unidos ante la posibilidad de compaginar estudios pagados y baloncesto. El primero de ellos saldrá en los próximos días en primera ronda del Draft de la NBA. Los tres eran claros proyectos para alcanzar el equipo profesional, y pese a ofrecerles un interesante contrato, en el caso de Sabonis y Alonso, no hubo posibilidad de retenerlos. De este modo se rompió la cadena en la línea de producción y abastecimiento para el primer equipo, que es el fin último de la cantera. Esta misma semana, el mejor jugador que hay en la cantera, Golden Nnaemeka Dike Egun, ‘Gody’, un cadete de 2,00 metros y 15 años y a pesar de su apellido nacido en Málaga, comunicó al club que se marchaba al Real Madrid, como apuntó ‘Malaga Hoy’. El Unicaja no ha podido retenerlo pues no tiene derechos sobre él al no ser todavía júnior. En cualquier caso, la fuga de Gody sienta otro peligroso precedente.

Un malagueños de 17 años

Alberto Díaz rubricará en los próximos días su nuevo contrato para las próximas tres temporadas. Es una excelente noticia que esconde tras de sí una mala. El base pelirrojo será el primer malagueño formado en Los Guindos que se asienta en el Unicaja en las últimas 17 temporadas desde que Bozidar Maljkovic decidió contar con Berni, Cabezas y Germán Gabriel en la campaña 1999. Si la cantera, además de un fin social, tiene como objetivo abaratar costes para el primer equipo generando jugadores, es evidente que esto no se ha cumplido. Justo por detrás de Alberto Díaz hay un grupo de jugadores en la órbita de la plantilla profesional: Karahodzic, Romaric, Soluade, Okouo y Todorovic. Como se puede comprobar, todos cupos de formación y extranjeros, ningún nacional. Como ya se ha explicado al comienzo de esta información que la nueva política es la de no fichar jugadores jóvenes de fuera de España, el club está ante un problema si estos proyectos no fructifican, pues detrás no se espera a nadie.

Consecuencias en el Clínicas

La única gran alegría que se ha vivido esta temporada en la cantera del Unicaja la ha protagonizado el Clínicas Rincón, que alcanzó las semifinales por el ascenso a la LEB Oro y compitió de forma destacada. El Clínicas está compuesto en su mayoría por jugadores cedidos por el Unicaja gracias al acuerdo de vinculación que se firma antes de cada temporada. La columna vertebral de ese equipo la componen Karahodzic, Romaric, Okouo, Soluade, Uta Rares, además de Corts y Juan Pedro Jiménez y Cobos. Es evidente que los cuatro primeros han cumplido su ciclo formativo en la LEB Plata y deben dar un paso adelante ya sea en Oro o cedidos en equipos de la Liga ACB. La idea del Unicaja es tener un equipo en la Liga EBA, que debe ser el júnior completado por jugadores séniors, por lo que por cuestiones de calendarios y jugadores, el Clínicas no contará con efectivos de la cantera. De este modo, es previsible que el Clínicas Rincón y el Unicaja no mantengan su acuerdo de vinculación. Esta temporada Joan Plaza tiró de jugadores como Karahodzic, Romaric y Okouo en varias ocasiones, algo que no podrá hacer si ese acuerdo no se mantiene, al ser entidades ya independientes.

El primer equipo, restringido

Sería erróneo calificar al Unicaja como un equipo de cantera, pues las apariciones en la élite de jugadores formados en sus categorías inferiores son contadas. La realidad es que el primer equipo es una meta muy restringida. Las exigencias que imponen los resultados en la ACB y en Europa no dan espacio a los jóvenes, aunque eso a veces depende del entrenador que esté al frente de la primera plantilla. La cantera de Los Guindos sí produce jugadores de nivel, y además hay un ejemplo reciente. Esta misma semana Brasil hacía pública su selección para competir en los Juegos de Río, y en la lista aparecían tres canteranos del Unicaja: Freire, Lima y Faverani. La falta de paciencia del club en algunos casos, como el de Lima, ha sido evidente. Quizá es una cuestión del modelo que se quiere o del que se pueda poner en práctica. Equipos como el Joventut o el Estudiantes acuden a los jugadores jóvenes por necesidad.