Malaga CF

Los nuevos retos de Plaza

Plaza, en un tiempo muerto del partido disputado en Archidona ante el Gran Canaria.
Plaza, en un tiempo muerto del partido disputado en Archidona ante el Gran Canaria. / Unicajab.Fotopress
  • El técnico afronta un año marcado por la renovación de la plantilla y por la Eurocup

  • El catalán cumple su cuarto año en el Unicaja con el objetivo de volver a competir al máximo nivel tras las dudas de la pasada temporada

Los aficionados malagueños aún se tendrán que acostumbrar a ver a Joan Plaza sin la barba que le ha acompañado las últimas dos décadas de su vida. Un cambio de imagen para afrontar una nueva temporada sin esa «coraza», en palabras del propio técnico. Pese a las dudas que se generó al final de la pasada campaña, el catalán cumplirá su cuarta temporada en el Unicaja y lo hará en una campaña de cambio, marcada por otra profunda remodelación de la plantilla y por la ausencia del club malagueño en la Euroliga y su paso a la Eurocup. Estos son algunos de sus nuevos retos al frente del Unicaja 2016-2017.

Plantilla renovada. Un equipo de apuestas y con varias incógnitas

Como en años anteriores, el entrenador del Unicaja ha tenido mucho peso a la hora de realizar los cambios en la plantilla. Tomó algunas decisiones difíciles, como prescindir de Markovic o Fran Vázquez, para rearmar el equipo. El técnico contará con una plantilla de 12 hombres pero el quinto pívot es el canterano Okouo, sin apenas experiencia en la Liga Endesa y con un rol muy limitado. Además no podrá echar mano de los cedidos Romaric, Uta o Karahodzic. Con esos mimbres, Plaza ha apostado por algunos hombres que conoce bien, como es el caso de Lafayette y por otros que se estrenan en la ACB y cuyo rendimiento es una incógnita, como Fogg o Brooks. Además, el entrenador tendrá que integrar cuanto antes al pívot que llegue en los próximos días para reemplazar a Mbakwe y a Waczynski, que está disputando el Preeuropeo (ayer anotó 11 puntos ante Portugal). Además del fichaje de los nuevos jugadores, mano a mano junto al secretario técnico Carlos Jiménez, el bloque de profesionales que se mantienen en el equipo resultará clave. El catalán está convencido de que Smith dará más en su segunda temporada, de que Suárez tiene que jugar sí o sí de ala-pívot y de que Alberto Díaz seguirá creciendo. Caso aparte merece Nedovic, posiblemente la estrella de este equipo. El serbio terminó por explotar en la recta final de la campaña, una vez que pasó definitivamente a jugar de escolta. Ya no tendría que existir ese problema de aclimatación, por lo que Nedovic tendrá galones en el equipo. Muchos ‘jugones’ en la línea exterior, cara a realizar un juego rápido y muy vertical, que el entrenador tendrá que equilibrar con los hombres interiores para compensar el equipo.

Nuevo etapa europea. Competir en la Eurocup con la mente en la Euroliga

La temporada que empieza a finales de este mes trae una gran novedad para el conjunto malagueño. El Unicaja ha dejado de ser un equipo de Euroliga y competirá por primera vez en su historia en la Eurocup. Esta exclusión de la máxima competición pareció afectar bastante la pasada temporada tanto a los jugadores como al entrenador. Ahora toca partir de cero y tratar de volver a ilusionar con la Eurocup. Plaza ya sabe lo que es llevar lejos en este torneo –la ganó con el Real Madrid cuando se denominaba ULEB y llegó a la final con el Cajasol de Sevilla– y ahora tiene en sus manos llevar al Unicaja lo más lejos posible en Europa, teniendo en cuenta que está en juego el regreso a la Euroliga.

Su relación con la directiva. Recuperar el buen clima interno en el club

Es un secreto a voces que la relación de Plaza con parte de la directiva del Unicaja quedó la pasada campaña muy deteriorada. Por ambas partes. Se dudó del entrenador cuando llegaron los malos momentos y el técnico expresó su malestar públicamente por esa situación. Además de los irregulares resultados deportivos, la exclusión de la Euroliga y los rumores sobre la marcha del entrenador también avivó estas tensiones internas. Tras el verano, parece que la calma ha vuelto al Unicaja, algo que se tendrá que mantener durante toda la temporada si se quiere llegar a buen puerto. Es evidente que este aspecto no es solo responsabilidad del entrenador, aunque dependerá en gran parte de los resultados que dé el equipo.