Mientras que el fichaje del base se le ha complicado en las últimas semanas, el Unicaja ha avanzado en la contratación del pívot de corte defensivo que buscaba para reforzar su juego interior. El cuerpo técnico quería incorporar a un interior atlético, consistente atrás y que pudiera ejercer tanto de ‘4’ como de ‘5’, según las circunstancias del partido y sus compañeros en pista. El hombre elegido es Diamon Simpson, según adelantó el periodista David Pick, y
el conjunto malagueño ya negocia con el estadounidense para cerrar su contratación.
Simpson es un jugador que encaja perfectamente en lo que busca el cuerpo técnico del equipo malagueño. Se trata de un pívot de 2,01 y 29 años que la pasada campaña militó en el Maccabi Tel Aviv. Es un jugador con bastante experiencia en Europa y que además conoce la Liga Endesa, ya que ha jugado en dos etapas distintas en el Estudiantes (2014 y 2016).
Su porcentaje de tiros libres, el principal punto débil
Los aficionados malagueños se desesperaban la pasada temporada cuando Musli u Omic iban a la línea de tiros libres. Dos jugadores interiores que sacaban muchas faltas pero que no solían aprovechar los tiros libres. Con Simpson podría suceder algo parecido, ya que su acierto desde la distancia es uno de sus principales puntos débiles. En su etapa en la Liga Endesa el jugador tuvo unos porcentajes de tiros libres del 53%, es decir que fallaba la mitad de los lanzamientos que intentaba. En la Champions League, con el Nymbuk, su promedio fue del 44% la pasada temporada. En la Euroliga, con el Maccabi, en seis partidos sólo metió cinco de los quince tiros libres que intentó (33%).
Nacido en Los Ángeles, Simpson es un pívot defensivo, buen reboteador y muy atlético. No es un hombre que esté llamado a ser referente en el Unicaja, al menos en el apartado ofensivo, aunque
con él el espectáculo está garantizado, ya que en el Estudiantes dejó algunos mates impresionantes, especialmente tras situaciones de bloqueo y continuación. Pero en líneas generales es un jugador de esos que hace el trabajo menos vistoso, que suele aportar mucha intensidad en el campo y gran compromiso con los equipos en los que ha estado. Características muy del gusto de Joan Plaza, que ha dado el visto bueno a su incorporación.
La
pasada temporada jugó en el Maccabi, promediando 9 puntos, 6,7 rebotes y 15 de valoración en la Euroliga, unos números más que decentes. Empezó el año en el Nymburk checo, con el que disputó la Basketball Champions League. En sus dos etapas en el Estudiantes, el jugador promedió 9 puntos, 4,8 rebotes y 10,9 de valoración en la ACB.
Cuerpo de ala-pívot
Simpson es el ‘cuatro y medio’ que reclamaba Plaza para la próxima temporada, en el sentido de que es un jugador que se puede desenvolver en ambas posiciones. Por altura y movilidad, el exjugador del Estudiantes es un ala-pívot, aunque su juego esté más próximo al de un ‘5’. El pívot de Los Ángeles se desenvuelve a la perfección en las inmediaciones del aro, tanto en ataque como en defensa. Pero si se aleja de la zona, en ataque su peligro es mucho menor. En este sentido, en ataque no tiene rango de tiro para jugar de ‘4’, aunque sí puede defender a ala-pívots móviles y puede alejarse del aro para puntear tiros.
Apenas tiene tiro exterior y sus porcentajes de tiros libres no son buenos. Por tanto, si se concreta su fichaje, Simpson podrá jugar junto a Suárez o Brooks, haciendo funciones de pívot o con Shermadini o Musli, aunque en este caso el equipo no tendrá amenaza exterior en sus pívots.
Con este fichaje,
el Unicaja ocuparía una de las dos plazas de extracomunitarios que tiene disponible y la segunda se reservaría para el base (Quinn Cook, como se ha contado en días anteriores, es uno de los objetivos). Quedaría por ver si Musli sigue o no en la plantilla y cómo se resuelve el asunto de los cupos. Con Suárez, Díez, Alberto Díaz, Okouo y Soluade como jugadores formados localmente –los dos últimos – como vinculados– tendrán que ser dados de alta en los partidos de Liga Endesa para cubrir los cuatro puestos de jugadores nacionales, o formados en España, que requiere la ACB.
Mientras que el fichaje del base se le ha complicado en las últimas semanas, el Unicaja ha avanzado en la contratación del pívot de corte defensivo que buscaba para reforzar su juego interior. El cuerpo técnico quería incorporar a un interior atlético, consistente atrás y que pudiera ejercer tanto de ‘4’ como de ‘5’, según las circunstancias del partido y sus compañeros en pista. El hombre elegido es Diamon Simpson, según adelantó el periodista David Pick, y
el conjunto malagueño ya negocia con el estadounidense para cerrar su contratación.
Simpson es un jugador que encaja perfectamente en lo que busca el cuerpo técnico del equipo malagueño. Se trata de un pívot de 2,01 y 29 años que la pasada campaña militó en el Maccabi Tel Aviv. Es un jugador con bastante experiencia en Europa y que además conoce la Liga Endesa, ya que ha jugado en dos etapas distintas en el Estudiantes (2014 y 2016).
Su porcentaje de tiros libres, el principal punto débil
Los aficionados malagueños se desesperaban la pasada temporada cuando Musli u Omic iban a la línea de tiros libres. Dos jugadores interiores que sacaban muchas faltas pero que no solían aprovechar los tiros libres. Con Simpson podría suceder algo parecido, ya que su acierto desde la distancia es uno de sus principales puntos débiles. En su etapa en la Liga Endesa el jugador tuvo unos porcentajes de tiros libres del 53%, es decir que fallaba la mitad de los lanzamientos que intentaba. En la Champions League, con el Nymbuk, su promedio fue del 44% la pasada temporada. En la Euroliga, con el Maccabi, en seis partidos sólo metió cinco de los quince tiros libres que intentó (33%).
Nacido en Los Ángeles, Simpson es un pívot defensivo, buen reboteador y muy atlético. No es un hombre que esté llamado a ser referente en el Unicaja, al menos en el apartado ofensivo, aunque
con él el espectáculo está garantizado, ya que en el Estudiantes dejó algunos mates impresionantes, especialmente tras situaciones de bloqueo y continuación. Pero en líneas generales es un jugador de esos que hace el trabajo menos vistoso, que suele aportar mucha intensidad en el campo y gran compromiso con los equipos en los que ha estado. Características muy del gusto de Joan Plaza, que ha dado el visto bueno a su incorporación.
La
pasada temporada jugó en el Maccabi, promediando 9 puntos, 6,7 rebotes y 15 de valoración en la Euroliga, unos números más que decentes. Empezó el año en el Nymburk checo, con el que disputó la Basketball Champions League. En sus dos etapas en el Estudiantes, el jugador promedió 9 puntos, 4,8 rebotes y 10,9 de valoración en la ACB.
Cuerpo de ala-pívot
Simpson es el ‘cuatro y medio’ que reclamaba Plaza para la próxima temporada, en el sentido de que es un jugador que se puede desenvolver en ambas posiciones. Por altura y movilidad, el exjugador del Estudiantes es un ala-pívot, aunque su juego esté más próximo al de un ‘5’. El pívot de Los Ángeles se desenvuelve a la perfección en las inmediaciones del aro, tanto en ataque como en defensa. Pero si se aleja de la zona, en ataque su peligro es mucho menor. En este sentido, en ataque no tiene rango de tiro para jugar de ‘4’, aunque sí puede defender a ala-pívots móviles y puede alejarse del aro para puntear tiros.
Apenas tiene tiro exterior y sus porcentajes de tiros libres no son buenos. Por tanto, si se concreta su fichaje, Simpson podrá jugar junto a Suárez o Brooks, haciendo funciones de pívot o con Shermadini o Musli, aunque en este caso el equipo no tendrá amenaza exterior en sus pívots.
Con este fichaje,
el Unicaja ocuparía una de las dos plazas de extracomunitarios que tiene disponible y la segunda se reservaría para el base (Quinn Cook, como se ha contado en días anteriores, es uno de los objetivos). Quedaría por ver si Musli sigue o no en la plantilla y cómo se resuelve el asunto de los cupos. Con Suárez, Díez, Alberto Díaz, Okouo y Soluade como jugadores formados localmente –los dos últimos – como vinculados– tendrán que ser dados de alta en los partidos de Liga Endesa para cubrir los cuatro puestos de jugadores nacionales, o formados en España, que requiere la ACB.